Caravaca Jubilar

El Camino de Levante con niños pasito a pasito

Escrito por Turismo de la Región de Murcia | 5/06/24 9:25

La Región de Murcia, que puede presumir de clima soleado, temperatura envidiable todo el año y diversidad de paisajes, ofrece además numerosos destinos ideales para visitar con niños. Y, aprovechando que es Año Jubilar en Caravaca de la Cruz, peregrinar en familia hasta allí por el Camino de Levante es el plan ideal. ¡La cantidad de parajes de ensueño y planes para hacer todos juntos es una pasada! 


El Camino de Levante se distribuye en 5 etapas, que vamos a ir desgranando una a una para que todo sea más fácil. Además, y para hacerlo mucho más apetecible y para que sea un reto para ellos, a los niños se les entrega el diploma del peregrino por tramos de menos de 50 km. 

Aquí os presentamos una selección de lugares que harán de vuestro recorrido con los más pequeños de casa una experiencia inolvidable en familia, de la primera a la última etapa:


La primera etapa es la que va de Orihuela a Murcia, en un recorrido de 24 kilómetros siguiendo el curso del río Segura. Es una excelente oportunidad para que los niños aprendan sobre la historia y la naturaleza de la Región. La ruta comienza cerca de la Catedral del Salvador en Orihuela y sigue a lo largo de la orilla del río, ofreciendo vistas impresionantes y oportunidades para descubrir iglesias, santuarios y museos.
Proponemos la Visita al Museo Arqueológico y la Casa de Miguel Hernández: una parada de lo más educativa para empaparnos bien sobre la historia y la cultura local. Y no podemos dejar de acercarnos al Trasvase Tajo-Segura, donde podemos enseñar a los niños sobre la importancia del agua en la Región.


La segunda etapa conecta Murcia con Alguazas a través de un paseo por la huerta de Murcia. Este tramo de 26 kilómetros discurre por la huerta murciana y es ideal para reflexionar y conectar con la naturaleza. Parte de Murcia y sigue hacia Alguazas, pasando por lugares emblemáticos como el Malecón y el museo dedicado a las tradiciones de la huerta.


Como visitas imperdibles en esta etapa, proponemos la del Museo de la Huerta y la Ñora, que es perfecto para enseñar a los niños sobre las tradiciones agrícolas, además de descubrir las acequias y el trabajo en la huerta. Cómo no, explorar y dejarse embaucar por la Vía Verde del Noroeste, un paseo seguro y educativo por antiguas vías ferroviarias convertidas en senderos. Y como colofón a esta etapa, una visita al Niño de Mula, lugar habitual de peregrinación y de visita que no te puedes perder siguiendo la Vía Verde del Noroeste.



En la etapa 3 descubrimos Alguazas y Mula. Aquí los niños van a disfrutar mucho entre castillos, atravesando paisajes de secano y badlands, con vistas impresionantes y oportunidades para aprender sobre la geología y la historia local. Desde Alguazas, el camino pasa por Los Rodeos y sigue el curso del río Mula hasta llegar a Mula. Recomendamos visitar los badlands. ¡Esto sí que es una lección de geología sobre la erosión y los paisajes áridos de la Región!. Imperdibles también son las visitas a la Iglesia de Nuestra Señora de los Remedios y a los restos romanos en Los Villaricos: una oportunidad para aprender sobre la historia romana in situ.

En la etapa 4, ya casi visualizando la llegada a meta, nos adentraremos en viñedos y paisajes montañosos entre Mula y Bullas. Este tramo de 21 kilómetros es una excelente oportunidad para aprender sobre la viticultura y la fauna local, especialmente en el Parque Regional de Sierra Espuña.  Y si estamos en Bullas, ¡cómo no vamos a acercarnos al Museo del Vino! Aprenderemos de lo lindo sobre la producción de vino y la importancia en la Región.

Y, por fin, nos adentramos en la etapa 5. Desde Bullas, a través de paisajes naturales, llegaremos a Caravaca. ¡El Santuario de la Vera Cruz nos espera! El tramo final del Camino de Levante es el más montañoso, con una subida de 500 metros. Sin lugar a dudas, un sprint final apoteósico antes de la llegada a meta. Perderse por el casco antiguo de Cehegín es obligado, al igual que descubrir la arquitectura histórica y las ruinas de Begastri. 

Y a tan sólo 2 kilómetros de Caravaca de la Cruz, no podemos dejar de acercarnos a Las Fuentes del Marqués. Un merecido picnic, un rato de juegos en la naturaleza para los niños o simplemente admirar la belleza sobrenatural de este paraíso, son excusas más que suficientes para ir. Y os decimos más, quien visita este rincón idílico, ¡repite!

Y, por fin, llegamos al Santuario de la Vera Cruz, donde nos espera la gran lección: la importancia de la Fe y la historia del Santuario. 


El Camino de Levante, a lo largo y ancho de cada una de sus etapas, es una experiencia enriquecedora tanto para adultos como para niños. Una vez completado llegaréis a la misma conclusión que nosotros, que es simplemente Extraordinario.